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La operación
El aumento de tamaño de la región mamaria masculina se denomina ginecomastia. Lo habitual es que este desarrollo excesivo se deba tanto a una acumulación de tejido graso en la región, como a un crecimiento de la glándula mamaria. Antes de realizar la intervención, hay que descartar un eventual crecimiento patológico del tejido mamario (por carcinomas, que muy raramente aparecen en la glándula mamaria de los varones).
Se trata de situaciones que suelen provocar complejos a los hombres que las sufren, debido a la apariencia ó sensación sicológica de tener un pecho poco macho. El paciente tiende a evitar el uso de prendas ajustadas. También resultan muy molestas y frustrantes las oscilaciones que se producen en las mamas cuando, por ejemplo, se practica deporte (carrera, bicicleta…).
El tratamiento consiste en resecar el tejido graso y el tejido mamario (glándula). Cuando el componente graso es abundante a veces puede ser suficiente con una liposucción en una clínica estética.
No obstante, la realidad es que el volumen se debe tanto al tejido graso como a la glándula. Por este motivo, la intervención la realizamos a través de una incisión periareolar media, con lo que abordamos la glándula, resecando el botón mamario, para luego realizar un despegamiento de la glándula mamaria en su conjunto y resecarla a su vez. Finalmente practicaremos una liposucción para evitar que aparezcan irregularidades.
Resultados
La intervención es muy bien tolerada con anestesia local más sedación y es importante dejar un drenaje en la zona operatoria y utilizar una faja compresiva durante varios días. Es frecuente la formación de hematomas que desaparecen con el tratamiento adecuado. El paciente se reintegra a su actividad totalmente normal en muy pocos días (de 3 a 7 días).
El resultado es muy bueno. El exceso de volumen ha desaparecido y el paciente recupera la confianza en sí mismo.